En un México ultramoderno dominado por el fast fashion y el ultra consumismo, llega Rejected. Es en 2018 cuando Rafa; fundadorx, propietarix, diseñadorx y todólogx, crea esta alternativa comprometida con la creación de piezas únicas con materiales sostenibles y conscientes.
Más allá de su impacto en la moda mexicana, Rejected también refleja una lucha más amplia: la resistencia de los emprendimientos alternativos en un entorno que a menudo margina a quienes se apartan del mainstream.
¿Qué es el Upcycling?
El concepto de upcycling no es nuevo, pero su popularidad ha crecido exponencialmente en los últimos años, especialmente en respuesta a la crisis ambiental global. En México, el upcycling ha encontrado un terreno fértil gracias a una rica tradición de reutilización y transformación de materiales.
Desde los tianguis locales hasta las ferias de artesanía, la idea de prolongar la vida útil de los objetos siempre ha sido parte del tejido cultural mexicano. Sin embargo, es sólo recientemente que el upcycling ha ganado visibilidad como una respuesta a la problemática del fast fashion y el consumo desmedido.
A diferencia de las grandes marcas que dominan el mercado, Rejected no solo se enfoca en la estética, sino en la ética de sus prácticas, ofreciendo una propuesta de valor que resuena con un público que busca autenticidad y responsabilidad social en sus elecciones de moda.
Para Rejected, el upcycling es más que una tendencia; es una filosofía que se refleja en cada aspecto de su proceso creativo. La marca rechaza la idea de que el upcycling se trata simplemente de agregar detalles superficiales a las prendas. En cambio, se centra en una verdadera transformación, que requiere una evaluación cuidadosa de cada pieza para determinar cómo puede ser reutilizada de manera significativa.
No es upcycling poner seguritos o hacer distress, usar cloro, teñir.
Rafa
Esta evaluación rigurosa asegura que cada prenda no solo sea visualmente estética, sino también funcional y duradera. “Es importante darle a alguien una prenda que va a poder utilizar muchas veces sin que se deshaga tras la tercera lavada”. Esta atención al detalle y compromiso con la calidad es lo que distingue a Rejected en un mercado saturado por productos desechables.
Proceso de recuperación y transformación
El corazón del trabajo en Rejected reside en su proceso de recuperación de materiales. A menudo, las personas les llevan prendas que de otro modo serían consideradas “basura”, confiando en que la marca puede darles una nueva vida. Este proceso no solo implica la transformación física de los materiales, sino también una revalorización de lo que se considera desecho.
Hay más de una posibilidad para todo lo que existe
El proceso comienza con la selección y clasificación de los materiales. Cada prenda es evaluada no solo por su estado actual, sino por su potencial para ser transformada en algo nuevo y valioso. A partir de ahí, Rafa trabaja en la reconstrucción de las piezas, utilizando técnicas que aseguren su durabilidad y funcionalidad. Esto puede incluir desde la costura y el bordado hasta la incorporación de nuevos elementos que realcen la prenda original.
Además de ropa, Rejected también crea accesorios utilizando residuos textiles, lo que demuestra su compromiso con la sostenibilidad en todos los aspectos de su producción. Esta diversificación de productos permite a la marca aprovechar al máximo los materiales disponibles, minimizando el desperdicio.
Proceso de compra
A diferencia de las grandes cadenas de moda, donde el cliente es solo un número más, Rejected ofrece una experiencia personalizada y cercana.
Lxs clientes pueden hacer citas para visitar el taller, un espacio íntimo donde pueden ver de primera mano el proceso de transformación. Sin embargo, la ubicación exacta del taller no se divulga por razones de seguridad.
La mayoría de las ventas se realizan de manera indirecta, con las prendas enviadas a través de servicios como Uber o de mensajería.
El desafío de ser alternativo
A pesar de su éxito, Rejected no ha estado exento de desafíos. El emprendimiento alternativo en México enfrenta numerosos obstáculos, desde la falta de apoyo institucional hasta la percepción negativa del público.
La moda alternativa a menudo es vista como inferior o menos seria que la moda convencional, una percepción que Rejected ha trabajado arduamente para superar. En un incidente reciente, la administración de la alcaldía de Cuauhtémoc multó y cerró temporalmente la tienda física de Rejected, lo que puso en evidencia la precariedad de los negocios independientes en el país.
Este tipo de incidentes no solo afectan a la marca en términos económicos, sino que también refuerzan el estigma que rodea a la moda alternativa.
El trabajo de emprendimiento es muy denigrado, obviamente el colaborar con artistas te da renombre y credibilidad, pero es difícil quitar el estigma de ‘es un bazarcito’
A pesar de estos desafíos, Rejected ha logrado construir una reputación sólida, en parte gracias a sus colaboraciones con artistas y creativos que comparten su visión de una moda más ética y sostenible.
El futuro de la moda en México
En los últimos años, ha habido un notable auge en la moda mexicana, impulsado en parte por eventos como la pasarela de CU (Ciudad Universitaria). Sin embargo, Rafa es crítico de lo que considera una “desvirtuación” de la lucha por una moda más consciente.
“No está mal hacer una pasarela de moda, pero por qué no hacer una protesta más activa para tener clases libres de moda en la UNAM”, sugiere, señalando la necesidad de una educación formal en moda que vaya más allá de los desfiles y las apariencias.
Para Rejected, el futuro de la moda mexicana debe incluir una resistencia organizada que promueva el conocimiento y la educación como herramientas de liberación.
“Es más fácil unirnos y hacer una resistencia estudiando, porque el conocimiento nos va a hacer libres… buscamos un movimiento que perdure”, afirma. Esta visión a largo plazo subraya la importancia de construir una base sólida para la moda alternativa en México.
Impacto social
Más allá de su impacto en la moda local, Rejected también juega un papel importante en la redefinición de los valores culturales y sociales en torno al consumo.
Al centrarse en el upcycling y la sostenibilidad, la marca desafía las normas de consumo que han dominado la industria de la moda durante décadas. En lugar de fomentar la compra rápida y desechable, Rejected invita a sus clientes y a su público en redes sociales, a reflexionar sobre el valor real de sus prendas y el impacto que tienen en el mundo.
Este enfoque ha resonado con un público que busca algo más que moda; buscan una conexión, una historia, y un sentido de propósito en lo que visten. Rejected ofrece justamente eso: cada prenda no solo es única en diseño, sino también en la historia que lleva consigo, desde su origen como “basura” hasta su transformación en una pieza de moda que desafía las normas establecidas.
En un país donde la moda alternativa aún lucha por encontrar su lugar, Rejected se alza como un ejemplo de resistencia creativa y compromiso con la sostenibilidad. A través del upcycling, la marca no solo crea moda, sino que también promueve una forma de pensar más consciente y reflexiva sobre el consumo. A medida que la moda mexicana sigue evolucionando, proyectos como Rejected demuestran que es posible combinar estética, sostenibilidad y durabilidad, ofreciendo una alternativa real al fast fashion y a la producción masiva.
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